viernes, 9 de agosto de 2013

Galletas de canela o Snickerdoodles Cookies


Estas galletas sorprenden y están muy ricas, son como unas galletas abizcochadas, es decir una mezcla entre galleta y bizcocho. Cuando las haces huele toda la casa como si hicieras torrijas.





Su historia es muy muy antigua se conocen desde hacen un montón de años, se dice que ya las comían los romanos, por lo que la receta varía según donde mires. Yo sigo una receta que me dieron en un taller que dio Taste of America, a la cual le he dado también un toque personal cambiando alguna cosa.

Pues lo dicho, ahí va la receta:

Ingredientes:

  • ½ cup  (o media taza de 240 ml) de mantequilla (unos 125gr) a punto pomada              
  • ½ cup  (o media taza de 240 ml) de manteca de cerdo (unos 125gr) a punto pomada
  • 1 ½ cups de azúcar (unos 340 gr)
  • 2 huevos talla L
  • 2 ¾ cups de harina (unos 325 gr)
  • 2 cucharaditas (tsp) de cremor tártaro
  • 1 cucharadita (tsp) de bicarbonato
  • ¼ cucharadita (tsp) sal
Para el “rebozado”

  • 3 cucharas soperas (tbsp) de azucar
  • 3 cucharaditas (tsp) de canela molida

Nos ponemos manos a la masa:

En un bol tamizamos y juntamos la harina, el bicarbonato y el crémor tártaro y reservamos.

En otro bol mezclamos la mantequilla y la manteca de cerdo, yo lo hago con la batidora de varillas, pero se puede hacer a mano. Una vez mezclado añadimos el azúcar. 



Luego añadimos 1 huevo y lo mezclamos durante 1 minuto y luego el otro huevo y lo batimos otro minuto. Si lo hacéis a mano y no usáis batidora eléctrica batir muy bien los 2 huevos y luego incorporarlos. Es muy importante batir bien los huevos.



Ahora vamos añadiendo poco a poco la harina, el cremor tártaro y el bicarbonato hasta que se integre todo. Como queda blandita la masa, lo metemos unos 30 minutos o más en la nevera para que se enfríe la mantequilla y la manteca.


Una vez  que ya ha endurecido, en un bol pequeño mezclo las 3 cucharas soperas (tbsp) de azúcar y las 3 cucharaditas (tsp) de canela molida.



Ahora, con la masa voy haciendo bolitas del tamaño de una nuez, yo la verdad es que me gusta que sean todas iguales y las voy pesando y hago cada bolita de 15 gr, da para un montón de ellas!! Cada bolita la rebozo en la mezcla de azúcar y canela.


Con el horno precalentado a 200 grados, en una bandeja forrada con papel de horno, voy horneando de 9 en 9 las bolitas, ya que ellas solas se aplastan y se expanden mucho y si ponemos más, se nos pegarían unas con otras. Pero eso varía en función del tamaño de las bolitas, después de la primera hornada ya veréis cuantas podéis poner.


Las dejamos unos 8-10 minutos en el horno hasta que vemos que están y las dejamos enfriar en el papel de hornos hasta que enfrían un poco y las pasamos a una rejilla para que enfríen del todo.



Algunos apuntes o trucos:

¿Qué es el crémor tártaro?
El cremor tártaro se emplea con mucha frecuencia, más de la que creemos, en la industria alimentaria. Es el aditivo denominado E-334, y su uso se extiende principalmente como uno de los ingredientes de la levadura química usada en repostería, en la industria vinícola como un corrector de la acidez del vino, así como para la elaboración de bebidas carbonatadas como la gaseosa. También en los caramelos, chicles, conservas vegetales, mermeladas, salmueras, salsas, sopas deshidratadas y otros productos.



En nuestra receta sirve para que se quede la galleta abizcochada. También se usa para estabilizar las claras de huevo para hacer merengue, para que la nata montada quede más espesa o para hacer soufflés.

Realmente la levadura química (La Royal) está formada con bicarbonato, Maicena y crémor tártaro. Si alguna vez no tenéis levadura y si crémor tártaro, podéis hacer levadura química casera con ½ cucharadita (tsp) de cremor tártaro más ¼ de cucharadita (tsp) de bicarbonato sódico más un cuarto de cucharadita de Maicena.

El crémor tártaro se puede encontrar en tiendas de repostería y en algunas de productos americanos. También podéis probar, a ver si hay suerte en la parte de comidas internacionales de grandes supermercados.

Yo la verdad es que nunca me ha hecho falta sustituirlo, ya que tengo en casa, pero he visto por Internet que se puede sustituir por la misma cantidad de zumo de limón o vinagre, o incluso por el sobre que contiene el compuesto ácido de las clásicas gaseosas o litines que podéis encontrar en el supermercado.

Ya vuelvo a hablar de medidas raras…
Como os he dicho, esta receta la aprendí del Taste of America, por lo que tiene las medidas americanas, que como yo tengo las medidas lo uso así directamente. Pero he mirado en Internet y he convertido las medidas a gramos. Las medidas tanto de cups (tazas en inglés) o de las spoons (cucharas en ingles) se pueden encontrar en tiendas de repostería e incluso en los chinos grandes yo las he visto. Repasamos que son las medidas usadas:

  • Teaspoon (tsp), es nuestra cucharita de postre
  • Tablespoon (tbsp), que sería nuestra cuchara de sopa
  • Cup, es la medida de una taza de 240 ml

Un toque especial
Si ha sobrado de la mezcla de azúcar y canela se le puede espolvorear un poco por encima de la galleta cuando las pasamos a la rejilla a enfriar.

Enfriar galletas
Una vez están hechas las galletas, no todas nos caben sobre la rejilla, por lo que yo según voy sacando del horno, voy poniendo las más frías sobre una cestita de mimbre, que como tiene agujeritos siguen enfriándose. Si las ponemos sobre una superficie que apoye toda la galleta sobre ella, no se terminan de enfriar bien y quedan un poco húmedas y blandas.



Conservar las galletas
Una vez ya frías las galletas, lo mejor para conservarlas es en una caja de lata, de las de toda la vida. Así te pueden durar más de 1 mes, aunque en mi casa siempre se han acabado antes del mes, no duran tanto!!!

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